El conflicto interno
lleno de soledad,
lleno de desvelo.

No veo más allá del cielo
sólo el frío anhelo
de un hombre sin sueños.

Más allá no hay nada...
sólo soledad,
mi compañía, mi morada.

El solitario

Sin risa, ni llanto,
viaja el solitario.
Hombre ajeno a la gente,
sencillo y bueno.

Extraño, confuso,
intenso y grave,
siempre con apariencia extraña
y cierto matiz de tristeza.

Es observador y ve cosas que nadie ve.
Sus sentimientos son diversos,
pero bellos.

Da cabida a lo hermoso,
pero también a lo horrendo,
hombre sin sueños...

Lamento

Sólo veo un camino sin futuro... y lloro.

Llanto

Y te colocas sobre mi hombro,
llorando con pena.

Lluvia de Invierno fría y triste,
sobre mi cuerpo y alma.

Anhelo de Primavera,
deseo de juventud perdida.

No llores...
Pronto escampará...

Evocación

Aire templado de Primavera,
llegas trayendo buenas nuevas,
con olor a flores,
miel y tierra.

Recuerdo dorado,
niñez olvidada,
se siente el ayer,
aún siendo hoy y pareciendo mañana.

Reflejo de felicidad,
abrigo y apego,
amor inocente.

Recuerdo olvidado,
vida pasada,
descuido sin remedio.

Mareo y caída
sobre agua plateada,
gris y desolada.

Olor putrefacto,
náusea y asco.

Dolor asqueroso,
recuerdo sin nombre.

Ajeno y mío,
dolor sacro,
sigue quemando mi alma atormentada.

Luz

¡No te vayas!
¡No!

Se fue, pero volverá...
¿Volverá?

Nublado asfixiante,
no me dejas respirar.

¡Oh, Luz,
no me dejes en la oscuridad!